¡ La creación, el bautismo y la perfección !

En la Biblia, uno de los relatos más cuestionados es el de la creación, uno de los ritos bastante aceptado es el del bautismo y algo en quien casi nadie cree es la perfección. Sin embargo, de todo esto tan constractivo se puede armar un rompecabeza con tanta coherencia teológica, que dificilmente no evoque un sentimiento de comprensión de lo aprendido. Es universal el saber que existe una creación, desde los relatos sumerios pasando por las tradiciones y cultos indúes hasta los numerosos ritos y creencias de los mapuches, la creación del mundo es un tema muy en común. Aunque este análisis no tiene el sentido de tener una argumentación en favor del creacionismo (porque no es el tema a tratar), incorporo la admisión de The Columbia History of the World cuando plantea en su pagina tres "nuestros mejores conocimientos más avanzados, careciendo de la magia poética de la escritura, parecen en un sentido menos creíbles que el registro en la Biblia". "En el principio creó Dios" (Génesis 1:1), aquí hay tres palabras que merecen la atención, "principio, creó y Dios", la primera, del hebreo "re´shit " tiene una correlación con la raíz semítica rosh "cabeza, suma, cumbre". La segunda, primer verbo de la Biblia "bara´" crear, este verbo tiene un significado teológico muy profundo porque es Dios quien desde el mismo comienzo, libera, levanta la cabeza y ejecuta una acción, la de crear la materia y así dejar en constancia su manifestación divina y soberana que origina y regula las cosas desde el inicio para su gloria. Por eso bara´siempre tendrá a Dios como sujeto. La tercera es Dios "elohim", sustantivo plural pero que se usa como masculino, se refiere tanto a la majestad como a su esencia Trinitaria y creadora. La tierra a la cual Dios busca "liberar" esta en un estado de "desorden y vacía" era necesario la intervención para eliminar el caos, los términos "desorden y vacía" no dan la idea de algo desolado como han pretendido algunos científicos y teólogos, que la tierra era perfecta y después por causa de un cataclismo quedó destruida. Estas palabras, que son sustantivos y no adjetivos, más que describir, nombran el estado de las cosas que existen, éstas son ¡desorden! y !vacía!. En esta etapa se hace presente el Espíritu de Dios quien tiene una actitud también "inquieta", ¡se movía!, (Génesis 1:2), vocablo que tiene el significado de "temblar y sacudir", pero más literalmente "cubriendo con las alas", en Deuteronomio 32:11 se usa para describir el revolotear del águila sobre sus crías, protegiendo y preparando su nido. puede entenderse como una forma para describir el trabajo organizador del espíritu de Dios, en las fases iniciales de Creación. "Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz." Ahora, ya solo resta escuchar el resultado de la intervención, "Y vio Dios que la luz era buena;", la luz es sinónimo de vida que contrasta con la oscuridad (Génesis 1:2) sinónimo de muerte (Genesis 1:4). La palabra hebrea "tov" es el primer adjetivo del relato de la creación y por supuesto, primero también de la Biblia, así como es "bara" el primer verbo. ¡Creo que no puede ser mejor la relación!. "tov", no solamente significa lo que es bueno intrínsecamente, sino que apunta a "un estado de las cosas" "lo que es apropiado para su función", esto es, "perfecto". Cada cosa y persona creada esta llevando el sello de la perfección, porque Dios hace las cosas para que cumplan su rol con toda cabalidad en el contexto de la plenitud. En el bautismo sucede exactamente lo que sucedió antes y después de la creación, la persona antes de conocer a Cristo estaba "vacía", "en constante desorden y confusa" y también "en oscuridad", "¡en muerte!. ¡como no tienen al Hijo, es imposible que tengan vida!, (1 Juan 5:12). El Espíritu de Dios no es estático, ¡el se mueve!, cuidando, revoloteando hasta disipar las tinieblas espirituales y encender "la luz". La razón por la cual existe la oscuridad es porque no hay luz, es imposible que el hombre por si mismo genere luz, no puede dar lo que no tiene, solo con una conexión puede venir la luz. Jesús es la luz del mundo, para Leonardo de Vinci la luz radicaba en los ojos; para la humanidad la luz radica en Cristo, quiera o no, acepte o no. Ante tanta evidencia la persona decide bautizarse como manifestación pública de su fe en Dios. El bautismo es un nacimiento, una creación, una liberación; ¡se ha creado una nueva vida!, se había estado muerto para poder nacer. Ahora puede vivir en el contexto de la plenitud, la plenitud espiritual, ¡la más perfecta de todas!.