Arelys escribe desde Estados Unidos
Visitar aquella ciudad fue una experiencia interesante. Vi cosas en verdad sorprendentes... al punto, que invitaban a meditar. Dos líderes, el legítimo y el que intentaba usurpar, habían peleado por la supremacía. El verdadero, por fortuna conquistó la victoria, y el otro, aun derrotado, se dedicó a engrosar cada vez más el numero de sus partidarios.
¿Cómo lo conseguiría? La estrategia que empleaba la mayoría de las ocasiones, era disfrazarse para aparentar ser otra persona. A veces usaba una máscara para hacerse pasar por un rico afortunado, otras, imitaba ser un sabio insuperable, un líder prometedor, y otros más. Pero si lograbas verlo un instante sin mascara, te convencías al momento que su rostro malévolo se asemejaba mas al de un monstruo, que al que aparentaba, de líder bueno y respetado.
A diferencia de este, el Líder legítimo se mostraba todo el tiempo con su verdadero rostro. Era, en todo sentido de la palabra, honorable, digno de confianza, y muy atento a las necesidades de sus ciudadanos. El Líder legal, reunido con sus consejeros, decidió levantar una estructura que beneficiara en alto grado a cada habitante, fuese rico o pobre.
El Plan consistía en crear un Banco que ofreciera ventajas especiales. Toda persona que depositara cualquier cantidad de dinero, le sería devuelto duplicado, en un tiempo especifico. El objetivo era emplear el efectivo para ayudar a las personas más necesitadas de la comunidad, a la vez que los inversionistas recibirían una cuantiosa recompensa.
El Plan era perfecto. Sin pérdida de tiempo se dio inicio a la obra, de acuerdo a los parámetros establecidos. Así, en pocos días, cada habitante tendría enormes ventajas a su disposición. Fue entonces que el falso líder derrotado, tras previo análisis con sus deshonestos colaboradores, decidió efectuar lo que denominaron "el contraataque". Este consistía, en levantar en cuestión de días, otro impresionante banco. Los métodos para atraer clientes serian diversos y variados. Cualquier idea que funcionara, era simplemente perfecta para sus macabros propósitos.
La estrategia delineada era lograr que cada persona adquiriera cientos de artículos no necesarios, y que invirtieran en otros innumerables servicios, a fin de reunir cada centavo disponible y depositarlo en el banco de los perdedores en lugar del Banco original, privando así al Líder legitimo de apoyo económico, a la vez que sus partidarios se privarían del beneficio de ver duplicado su capital. Al concluir la sesión de la ilegal junta, cada malvado ayudante se desplazó a cada pulgada de terreno disponible, para establecer mercados, centros, salones, y hasta lo inimaginable, a fin de recaudar tanto como fuese posible.
Como medida extra, en todo lugar adiestraron personal para que ocultos de la vista pública, hipnotizaran a cada cliente, a fin que gastara más de lo que inicialmente se había propuesto para suplir sus necesidades. Uno de esos días, cuando los habitantes de la ciudad despertaron, descubrieron entusiasmados, la existencia de los dos bancos. Corrieron entonces a prisa para informarse de sus programas y servicios. Una vez escuchadas ambas presentaciones, la multitud tomó una mínima pausa para analizar ambas propuestas, y sin pensar debidamente, llegaron casi todos a esta lamentable decisión:
"Si depositamos en el Banco oficial, tendremos que esperar a que se duplique lo invertido. Si depositamos en el otro banco, podremos disfrutar cientos de ventajas momentáneas. Como dice el dicho, es preferible un pájaro en mano que cien volando"
El plan del líder desleal había funcionado. Aun así, el Banco legal recibía de vez en cuando, una inversión más o menos cuantiosa, de algunos de los ciudadanos más sabios, fuesen ellos de abundantes o limitados recursos. Es asombroso el enorme éxito que momentáneamente ha logrado Satanás. No importa en qué inviertas tu dinero; inevitablemente lo estas depositando en uno de los dos Únicos Bancos que existen. Uno es el terrenal, el otro el celestial.
Cada centavo que deposites en el banco terrenal, lo perderás. Cada centavo que inviertas en el banco celestial, ya sea que lo deposites de ofrenda, como ayuda a los necesitados, para apoyar diferentes ramos de la Obra, etc., lo recuperarás enormemente multiplicado y con bendiciones agregadas.
Es claro que no vivirás muchísimo mas en este mundo porque está a punto de colapsar. En este momento tú destino eterno podría estar ligado al banco donde mayores y más constantes inversiones realizas.
"Donde este tu tesoro, allí estará tu corazón"
Deseándote eternas bendiciones,
Arelys.
