sábado, 23 de octubre de 2010

jueves, 21 de octubre de 2010

El mejor sermón de mi vida!!

Si eres un predicador, te pregunto ¿Cuál ha sido el mejor sermón que haz predicado? Si eres de los que no han predicado, te pregunto ¿Cuál ha sido el sermón más importante que haz escuchado? Te sigo preguntando, ¿Por qué fue el más importante? Respondiendo esa pregunta, podría decir que el sermón más importante que yo escuché, lo escuché en los labios de Jesús y debió ser de unos 10 segundos. La influencia de ese mini sermón cambió mi vida y la de millones desde que Jesús la dijo y que Juan registró en su evangelio en el capítulo 3 y verso 16.

Si solo meditáramos en ese pasaje algunos minutos por día, nuestra vida espiritual fuera más vigoroza y sin duda llena de milagros. Es la esencia del evangelio, que no es otra cosa que el amor. En este mundo marcado por el YO del cual no se escapan religiosos ni ateos, es el amor la mejor y UNICA  medicina. El amor de Dios consistió en quitarse él para que tú y yo tengamos. En todo nivel al ser humano lo que más le importa es tener, el tener cambia la relación de las cosas. Si antes no tenías nada, y de repente por un aspecto fortuito recibes, entonces serás la atención de las miradas, algunas para admirar, otras para codiciar.

Es dificil escapar de esa naturaleza, en realidad, nadie puede escapar, pues es nuestra sentencia producto del pecado. Por eso, el amor solo se entenderá cuando se aplica. Digamos o hagamos lo que queramos, no importa el grado o la influencia, si eso no estuvo motivado por el amor, para Dios no sirve. Recordemos que el amor no es una acción nuestra, es de Dios y él y solo él es el encargado de ponerlo en el corazón.

Como cristianos actuemos con amor, que ese sea siempre nuestro mejor aliado!