miércoles, 1 de julio de 2009

el apetito desenfrenado, una replica de Babilonia?

De los cinco sentidos que Dios dispuso en el ser humano cuando lo creó, es el del gusto el que fue mas probado al principio, claramente este no podia venir solo sino estaba ligado al de la vista y el olfato. Por el pecado, el apetito se pervertió y se ha encargado de llevar a la tumba a millones de personas. Eva fue en este plano tentada, Satanás mostró a través del fruto que la curiosidad, la duda y el alegato forman parte de una personalidad perfecta. No había nada de malo en querer ser como Dios, al contrario, seria una bendición para ella. Pues los límites dentro de los que opera el hombre, se abrirían a la misma dimensión en lo infinito y desconocido, es a saber, el terreno de Dios. Toda esta "maravilla" de ser como Dios, estaba partiendo desde el mismo sentido del paladar, al ver que "el arbol era bueno para comer, agradable a los ojos y codiciable para alcanzar sabiduria". Mas tarde, un joven, también fue probado en este mismo ángulo, Daniel debía participar de ciertas comidas que por mandato real iban en dirección opuesta a la otorgada por Dios a través de las leyes del pacto. La firmeza de Daniel y sus amigos fue un espaldarazo a sus padres por la buena crianza entregada y sobre todo a Dios, fuente de poder y dominio. Es interesante que fue el tema del apetito lo que desarticuló a toda una ciudad inexpubnable y hacerla blanco de la incursión enemiga. Los Medos aprovechando la borrachera, producto del vicio desenfrenado, entraron y tomaron a Babilonia para reinar después sobre ella. Jesús mismo fue probado en este sentido cuando en el desierto, cuarenta días después, el deseo de alimentarse venia como prioridad, solo que, ya no era prioridad, si venia esta manipulada por el enemigo, para conseguir ventaja sobre su blanco. Jesús demostró que la comida es asunto de vida o muerte, solo que es de muerte, sino se actúa de acuerdo a como esta escrito en la Palabra. En apocalipsis 14 encontramos "si alguno adora a la bestia...Este también beberá del vino de la ira de Dios". Al tomar estas palabras, solo meditando en una aplicación espiritual, podemos decir, que el asunto del apetito se ha vuelto una verdadera adoración, son muchos los que ceden ante la atracción de la gula, les cuesta ordenar sus hábitos alimentarios, o hay un fanatismo extremo en el asunto del comer o el beber o hay un relajo abierto y sanjado en las normas del estilo de vida saludable. Así como en los días de Daniel, Babilonia cayó por los desordenes de la bebida y los alimentos de una noche desenfrenada, así también, en los últimos días cederán aquellos que no estén ajustados al régimen de vida que Dios ha dispuesto desde la misma creación, y que a través de su sierva ElenaWhite ha replanteado. La puesta en marcha de un estilo de vida acorde, permeará el ser de los verdaderos adoradores, sobre ellos no se impondrá la marca, ni la imagen de la Bestia, sino el sello protector, identificador y registrador del Dios vivo.