Por lo menos es lo que indica la foto, gentilmente proporcionada por Manuel Zuñiga, Líder de jóvenes de la iglesia de San Martín, Ciudad de Iquique, que como bombero rescatista estuvo varios días en la búsqueda de cuerpos humanos.
El ángulo del sofá pudo haber salvado una vida o más de una, si en esa ocasión buscaron y econtraron ese "refugio". La Biblia enseña el angulo de la Salvación, no para uno o dos, sino para toda la humanidad. Dios en la persona del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo han procurado rescatar al hombre que yace tendido en los escombros del pecado desde hace miles de años. "Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven". El Espíritu Santo cuando interviene y toca da vida. Es el encargado de dar una vida victoriosa, actividad que participan también el Padre y el Hijo. El llamado de venir al refugio de la salvación no es ocasión de un momento por un momento de desastre, sino de toda la vida. El pecado trae desastre permanente, solo escondidos en Jesús se puede salir ileso. Con urgencia se ruega para venir, Dios desea juntar a sus hijos como la gallina busca a sus poñuelos cuando se acerca la tormenta.
La Biblia es la búsqueda de Dios tratando de encontrar a sus hijos. Ojalá que nosotros busquemos el lugar indicado! "Yo, yo Jehová, y fuera de mí no hay quien salve". Isaías 43:11
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